El trovador |
Cantaba para públicos de toda clase y condición |
Dejaba oir su dulce voz – el trovador |
A los salones él llegó cantando gestas de valor |
Viva las guerras, relató – el trovador |
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Pero también él escuchó gente que era pobre y gris |
Al calor del humilde hogar tambíen cantó el trovador |
Y en las tabernas del lugar el dulce vino fue a loar |
El vino que hace olvidar – el trovador, el trovador |
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La lalala lala laylala laylala... |
La lala laylala la... |
La lalala lala laylala laylala... |
La lala laylala la... |
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A los conventos él llegó y los milagros pregonó |
Los que jamás la gente vio – el trovador |
Y con sus cánticos de amor los corazones inflamó |
Las más hermosas conquistó – el trovador |
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El campesino y el señor oyeron al trovador |
Hasta todos llegó la voz del trovador, del trovador |
Y no tenía nada más que su alegría y su canción |
Qui en todas partes derramó – el trovador, el trovador |
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El trovador no canta ya, al fin el barro le cubrió |
Pero las gentes guardarán con emoción |
El recuerdo dulce de su voz que tantas penas consoló |
Ya jamás olvidarán al trovador |
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Oh... la lalala lala laylala laylala... |
La lala laylala la... |
La lalala lala laylala laylala... |
La lala laylala la... |
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Oh... la lalala lala laylala laylala... |
La lala laylala la... |
La lalala lala laylala laylala... |
La lala laylala la... |
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La... |